Oración de la serenidad

En el mundo, el ser humano está expuesto a infinidades de complicaciones que se les pueden presentar en la vida, muchos de ellos se rinden al intentar sobreponerse a esto, pero solo con la ayuda de Dios y los Santos tendremos la fuerza necesaria que necesitamos para levantarnos y emprender un camino de bien y de paz. Toda esta paz que se nos es ofrecida, es dirigida a la oración de la serenidad cuyo propósito es la tranquilidad de nuestras vidas.

La oración de la serenidad nos agrega un valor positivo, ya que esta oración nos designa a la calma y nos ayuda con el estrés, aclara nuestra mente y permite que sobrellevemos y resolvamos todos esos obstáculos y conflictos de manera satisfactoria, gracias a la fe que ponemos en ella.

Esta increíble oración tiene varias interpretaciones de origen a origen, y se le atribuye al teólogo, filósofo y escritor estadounidense de descendencia alemana Reinhold Niebuhr. Su esposa sugería que fue creada en el año 1940, y su hija, en un libro que se publicó en el año 2003, especificaba que la primera vez que se entonó fue en 1943 en un culto religioso en Heath, Massachusetts, lugar donde la familia del autor solía pasar los veranos.

A pesar de esto, Fred Shapiro, quien es especialista en investigar todas aquellas citas que han sido atribuidas incorrectamente, sugirió en el año 2008 que Reinhold, a quien veía como alguien muy honrado y modesto, la pudo haber adaptado de forma inconsciente tomando como base frases que llegaron a él, ya sea por oído o escritas en una que otra investigación teológica de las que solía realizar.

Hay una cantidad exagerada de personas a quienes se les puede llamar nominados a supuestos autores de esta oración, entre ellos se encuentran Marco Aurelio, San Agustín, Epíteto, Aristóteles, Francisco de Asís, Santo Tomás, una gran cantidad de líderes militares de la Segunda Guerra Mundial e incontables fuentes anónimas que empiezan en el Antiguo Egipto.

En 1950 se publicó un libro escrito por Theodor Wilhelm el cual produjo confusión, pues allí también se reproducía esta plegaria. En ciertas revistas se llegó a decir que esta plegaria se ha atribuido prácticamente a todos los teólogos, filósofos y santos que han existido a lo largo de la historia.

Por todo esto, otras fuentes solo consideran a la oración de la serenidad un proverbio anónimo que ha sido transmitido de generación en generación gracias a la tradición oral.

Hay un artículo publicado en el 2008 por Shapiro, donde se exhiben documentos de antes de 1942 citando la oración de la serenidad, solo que con ciertas variaciones, y en ningún momento dando crédito a Niebuhr. Estos documentos tienen procedencia de distintas bases de datos de internet.

Un vecino y amigo de Reinhold Niebuhr, llamado Howard Robbins, el cual había asistido a un culto religioso de su vecino en Heath, le pidió permiso para empezar a reproducir la oración de la serenidad en folletos, teniendo como receptores a las fuerzas armadas, y aquí empezó su difusión.

Desde que se empezó a propagar, la han adoptado ampliamente muchas personas, tanto de creencias religiosas como no creyentes, extendiéndose tanto su popularidad y aceptación que se han podido divisar hasta placas urbanas con la oración de la serenidad grabada. También te recomendamos que conozcas la oración de Santísima Trinidad.

Orar para tener paz y para llenar tu ser

Oración de la Serenidad según Reinhold Niebuhr:

“Viviendo día a día;

disfrutando de cada momento;

sobrellevando las privaciones como un camino hacia la paz;

aceptando este mundo impuro tal cual es

y no como yo creo que debería ser,

tal y como hizo Jesús en la tierra:

así, confiando en que obrarás siempre el bien;

así, entregándome a Tu voluntad,

podré ser razonablemente feliz en esta vida

y alcanzar la felicidad suprema a Tu lado en la próxima.

Amén.”

Oración de la serenidad

San Francisco de Asís es uno de los cuales tiene una versión de la oración de la serenidad. San Francisco de Asís es un santo, que fue fundador de la Orden Franciscana, la cual proviene de una segunda orden llamada Hermanas Clarisas y de otra tercera orden seglar, las cuales salieron de la autoridad de la Iglesia en la edad media.

Es conocido como un gran ejemplo de espiritualidad y bondad en la historia de la cristiandad. Fue hijo de una comerciante de su ciudad, pero con las vueltas que da la vida, llegó a vivir en la más estricta pobreza en observación de los Evangelios. Él animaba a sus seguidores a llevar una vida simple, así como la llevaba él. San Francisco de Asís es uno de los mayores representantes en la iglesia católica de la simplicidad, es decir, profesaba sobre llevar un estilo de vida sencillo, libre de lujos, y alcanzar la felicidad a través de cosas realmente importantes, como la familia, la naturaleza, y ayudar a quienes más lo necesitan.

La forma de vivir de Francisco no fue bien vista por algunos de los miembros más recientes de la orden mientras él crecía. Entre las estigmatizaciones visibles él fue el primer caso y el año de su canonización fue 1228 y se festeja su día el 4 de octubre.

serenidad

Oración de la Serenidad según San Francisco de Asís

“Dios mío, concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar;
el valor para cambiar las cosas que puedo cambiar y la sabiduría para conocer la diferencia.
Viviendo un día a la vez, disfrutando un momento a la vez;
aceptando las adversidades como un camino hacia la paz;
pidiendo, como lo hizo Dios, en este mundo pecador tal y como es, y no como me gustaría que fuera;
creyendo que Tú harás que todas las cosas estén bien si yo me entrego a Tu voluntad;
de modo que pueda ser razonablemente feliz en esta vida e increíblemente feliz contigo en la siguiente. Amén”

Deja un comentario